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| Acto inaugural del Curso, con la presencia del Arzobispo de Valencia, Monseñor Carlos Osoro,(segundo por la izquierda), y Gran Canciller de la Universidad de Valencia, del Obispo de Santander, Monseñor Vicente Jiménez Zamora, (tercero por la izquierda), el Vicerrector de Extensión Universitaria, Dr. José Luis Sánchez, (primero a la izquierda) y el secretario del curso, Dr. Ildefonso Rodríguez |
El acto inaugural contó, además de los organizadores del mismo, con la presencia del Obispo de Santander, Monseñor Vicente Jiménez Zamora.
La lección primera fue a cargo del Arzobispo de Valencia, Monseñor Carlos Osoro. Seguidamente muestro un resumen de la misma.
NOTA DE PRENSA | UCV
Monseñor Osoro: “En Julián Marías vemos la necesidad de que los pensadores cristianos estén presentes en la construcción de la sociedad”
El Arzobispo de Valencia y Gran Canciller de la Universidad Católica de Valencia ha analizado la visión del cristianismo del filósofo español en los Cursos de Verano de Santander
Monseñor Carlos Osoro, Arzobispo de Valencia y Gran Canciller de la Universidad Católica de Valencia “San Vicente Mártir” (UCV) ha analizado esta mañana la visión del cristianismo de Julián Marías en el Curso de Verano de Pensamiento Cristiano de la UCV en Santander, centrado en esta edición en la figura del prestigioso filósofo español con motivo del centenario de su nacimiento. En su intervención, Mons. Osoro ha asegurado que en Julián “se ve la necesidad de que los pensadores cristianos estén presentes en la construcción de la sociedad”.
Han acompañado a Mons. Osoro en su conferencia el Obispo de Santander, Mons. Vicente Jiménez; el Dr. José Luis Sánchez, Vicerrector de Extensión Universitaria y Cultural de la UCV y director del curso; y el Dr. Ildefonso Rodríguez, secretario del mismo.
“Para que un edificio no se derrumbe debe poseer unos buenos cimientos y una cultura que deja de tener a Dios en sus cimientos construye en muy malas condiciones. En esta época es esencial la presencia de la vida cristiana y de sus pensadores en la construcción de esta sociedad, como lo hizo Marías. Resulta esencial para el ser humano que la Iglesia esté presente en la cultura”, ha aseverado.
El Gran Canciller de la UCV ha recordado, en ese sentido, que el renombrado filósofo vallisoletano “no tuvo vergüenza de decir que era cristiano y de pensar como tal”; su figura invita al resto de los hombres, fundamentalmente a los intelectuales no creyentes “a que no olviden que la fe da al pensamiento una profundidad que saca al ser humano de sí mismo y le hace da una proyección maravillosa”.
En opinión de Mons. Osoro, el pensamiento de Marías posee una actualidad “tremenda” a causa de la pasión de este por el hombre. “Descubrió, de hecho, que Dios tuvo también una gran pasión por el ser humano haciéndose uno de ellos. Compartir ese fuerte sentimiento con Marías es una tarea urgente porque es ahí donde se halla la auténtica hondura del hombre”, ha apostillado.
“Los cristianos hemos de aportar nuestra adhesión a Jesucristo, que configura un modo de saberse y decirse sobre sí mismo. Ese es uno de los siete ejes estructuradores de la fe de Marías, que la religión es un atributo exclusivo de la vida personal y, por tanto, se trata de una dimensión esencial de la vida del hombre, de la que no podemos prescindir”, ha advertido.
Otro de los ejes señalados de la fe de Marías por el Gran Canciller de la Universidad Católica de Valencia es que en el cristianismo “se descubren las hondas dimensiones de la libertad, lo que supone también una responsabilidad”.
De igual modo, el Arzobispo de Valencia ha subrayado que “lo más innovador” del cristianismo para el intelectual español, que no tiene “parangón” con ninguna otra religión o filosofía, es “la inserción de Dios en la historia, la unión de la persona divina con la condición humana y lo que esto significa para la humanidad y el hombre concreto”. Mons. Osoro, ha indicado, de la misma manera que el Misterio de la Encarnación fue para Marías un hecho “fundamental” en la historia de la humanidad”.
“Una palabra clave en el pensamiento y la vida de Marías era el amor. Él explicó con mucho esmero y brillantez qué significa ese Dios cristiano que es amor, así como remarcó que el ser humano es criatura amorosa”, ha señalado.
El último de los siete ejes de la fe de Marías, apuntados por el Gran Canciller de la UCV es la noción de pecado, “que él muestra que no es primeramente moral, sino que debe verse desde otras situaciones”.
Mons. Osoro también se ha referido a lo “troncal” que resultó el Concilio Vaticano II para la vida de Marías: “Fue un momento de gran esperanza en que la Iglesia intenta dar respuesta al acompañamiento del ser humano en todas sus direcciones. Marías consideró que el Concilio abrió todas las puertas para que la Iglesia pudiese continuar en su afán de acceder a todas las situaciones del ser humano para acompañarlo”.
El extracto del Curso se ha realizado contando con las páginas del sitio de internet que la Universidad Católica de Valencia pone a disposición de todos nosotros y de la que es autor el periodista David Amat, que aparece en la imagen adjunta en plena actividad profesional.
FERNANDO ALONSO: "LAS GRANDES LECCIONES
DE LA AMISTAD ENTRE ORTEGA Y MARÍAS SON LA HONRADEZ INTELECTUAL, EL VALOR DEL
PENSAMIENTO Y EL COMPROMISO CON LA VERDAD"
Tras la conferencia de Monseñor Osoro ha
tenido lugar la intervención del escritor y analista cinematográfico Fernando
Alonso, que ha analizado la "amistad creadora" de Marías con su
maestro, el filósofo José Ortega y Gasset. En su ponencia, Alonso ha hecho
especial hincapié en que las "grandes lecciones" que surgen de la amistad
entre Ortega y Marías son "la honradez intelectual, el valor del
pensamiento y el compromiso con la verdad".
"Marías resulta un ejemplo de vida, de
lucidez intelectual y, a última hora, un acicate para seguir pensando, para
seguir adelante en cualquier circunstancia. Él y Ortega hicieron suyas en lo más
hondo las tareas de la filosofía, siempre en busca de la verdad", ha
expuesto Alonso.
El escritor madrileño ha relatado la difícil
situación de Marías tras el final de la guerra civil "a causa de su amistad
y colaboración con otro hombre bueno, Julián Besteiro. Poco después fue
traicionado y denunciado por un amigo de la Universidad, lo que le supuso a Marías
unos meses de cárcel y el ostracismo en la universidad".
En referencia a Ortega, exiliado tras la
contienda nacional, Alonso ha apuntado que la "profunda alineación
intelectual" de Marías con este también le perjudicó en su posible
incorporación a los ambitos académicos. "Pero Marías nunca hubiera sido
infiel a sí mismo para lograr un objetivo", ha asegurado.
"Fueron amigos y creadores, en el más
puro sentido de ambos términos, durante los 23 años en que se conocieron, hasta
la muerte de Ortega. Su amistad intelectual se cifró, además, en pensar juntos,
en construir unos instrumentos intelectuales independientes pero dentro de una
fecunda relación de maestro y discípulo", ha indicado.
Así, Alonso ha calificado de la metafísica
de Ortega como "una innovación radical en la historia del
pensamiento"; mientras que la continuación de esa "ingente
tarea" por parte de Marías ha permitido que esa obra "no se haya
desvanecido y, aún más, haya podido llegar hasta sus últimas
conclusiones".
Para el analista cinematográfico Ortega
"alumbró la filosofía de la razón vital y puso al pensamiento español a la
altura de su tiempo". Tras su muerte y con un puñado de proyectos
inconclusos y de obras no escritas, "fue Marías el que coronó esa aurora
de la razón vital imaginada por Ortega. En ese sentido, Alonso ha subrayado que Antropología
Metafísica y España inteligible son dos obras
"capitales" del pensamiento contemporáneo.
Alonso ha definido finalmente la devoción de
Marías por su maestro con las palabras de este último: «En Ortega había un
temblor, pero hecho de serenidad. Ortega nos iba moldeando el alma. Nunca sabría
decir lo que le debo. No es posible decirlo, hay que serlo. Lo que Ortega ha
sido en este siglo, pocos lo saben, tal vez nadie. En todos los órdenes sin
excepción ha dejado huella».
Al día siguiente comenzó su intervención Monseñor Sánchez Sorondo, Canciller de la Pontificia Academia de Ciencias Sociales
Monseñor
Marcelo Sánchez Sorondo, Canciller de la Pontificia Academia de las Ciencias
del Vaticano ha participado esta mañana en el Curso de Verano de Pensamiento
Cristiano de la Universidad Católica de Valencia "San Vicente Mártir"
(UCV) en Santander, centrado en esta edición en la figura del prestigioso
filósofo español Julián Marías. Mons. Sánchez Sorondo ha expuesto en su
ponencia que "es misión de América ser puente entre ambos océanos para
llevar el Evangelio a Asia, donde solo el 3 por ciento es cristiano; es más, si
no se cuenta con Filipinas, solo el uno por ciento".
En
ese sentido, Mons. Sánchez Sorondo ha recordado la importancia que concedió
Marías a San Juan Pablo II, que un realizó un esfuerzo "sobrehumano"
en el mundo globalizado por "intentar mostrar el amor de Dios mas allá de
cualquier confín y, al mismo tiempo, por querer hacer respetar la justicia en y
entre las naciones. Una exhortación para que no haya una ciencia que traicione
el hombre que la ha creado, para que no haya un pueblo inferior a otro en la
participación de los bienes y de los servicios y también, y sobretodo, en la
participación de la nueva energía de la gracia divina".
"La
reflexión de Marías en su obra Sobre el Cristianismo (Madrid,
1997) nos estimula e incita a despertarnos del sueño del secularismo y del
nihilismo para estar con la consciencia intelectiva y afectiva siempre
vigilante a fin de realizar plenamente el proyecto cristiano, desde nuestras
propias vidas y desde un nuevo inicio de milenio representado por no pocas
problemáticas y de grandes desafíos: es una reflexión que significa un
auténtico momento de gracia que no hay que dejar pasar", ha asegurado.
Frente
a las nuevas formas de ateísmo que reniegan de las raíces cristianas de
Occidente, el Obispo argentino se ha referido a la insistencia de Marías en que
Occidente es una realidad "muy precisa", definida de sus tres
diversas raíces: "La razón filosófica y científica de origen
principalmente griego; el orden según autoridad y derecho, proveniente de Roma;
y la religión hebrea y cristiana, personal, que considera a Dios como Padre y
al ser humano como su imagen libre, llamado a participar de la vida
divina".
Para
Marías, ha incidido Mons. Sánchez Sorondo, el cristianismo es una religión
"histórica", que tiene su origen "en la plenitud de los tiempos
con la Encarnación, caracterizada por datos y hechos precisos, hasta el punto
de incluir en el Credo el nombre histórico de Poncio Pilato".
El
ateísmo "más extendido" en Occidente, en opinión de Marías, era el
"relativismo relativo", según ha señalado el Canciller de la
Pontificia Academia de las Ciencias Sociales. Ante la afirmación de los
pensadores de dicha corriente ideológica de que "la frase "Dios
existe" está privada de sentido", Marías contestaba que "el
filósofo que niega cualquier resultado no empíricamente verificable, está
postulando él mismo la contradicción de un resultado no empíricamente
verificable".
"Por
otra parte, si la filosofía da la espalda a su principal cuestión, no por ello
tal problema deja de existir. Sucede en vez que es la filosofía la que pierde
su condición fundamental: la de la radicalidad. No es que la filosofía tenga
que ser radical o profunda, sino que ésta consiste en serlo", ha aducido.
El
Obispo argentino ha hecho énfasis, precisamente, en que para Marías, el
"punto de inflexión" de la filosofía se produjo con la obra de Ortega
y Gasset, centrada en una marcada atención por la vida humana, sobre la
esencial conexión entre el yo y el mundo ("yo soy yo y mi
circunstancia"), sobre la idea de verdad como alétheia y, sobretodo, sobre
la inseparabilidad entre la razón y la vida en esa noción sintética acuñada por
Ortega de "razón vital".
Marías
consideraba que la filosofía del siglo XX "era la más apta para entender y
expresar la visión de la realidad presente en el cristianismo" porque,
partiendo de ese punto de inflexión, "o sea desde la persona como yo o sí
mismo viviente absoluto por participación", resulta "necesaria"
la pregunta por Dios y consecuentemente "por la realidad creada del ser
humano".
"Desde
ese reflexión, Marías intenta reelaborar las categorías y conceptos que
respondan de la manera más adecuada a la concepción del hombre imago
Dei. Él subrayó que el cristianismo, debe ser entendido como religión en
su sentido más pleno, capaz de interpretar el mundo desde una perspectiva
religiosa inclusiva e universal. Es por eso que sin esta, el cristianismo
resulta estéril, ineficaz y carente de interés. Un cristianismo puramente auto-referencial
y secularizado es incapaz de solicitar al hombre de hoy", ha remarcado.
Finalmente,
Mons. Sánchez Sorondo ha hecho referencia a la reivindicación de Marías de que,
"desde el punto de vista del cristianismo en su significado religioso, hoy
más que nunca, estamos llamados a recomenzar desde este núcleo, o sea desde el
misterio de la Trinidad, desde la Encarnación y desde Pentecostés o la
presencia del Espíritu Santo en la historia. La palabra ?teología' debe tener
su referencia primaria en Dios. En Dios, uno y trino, usando la recta razón, se
deben encontrar las llaves últimas para resolver las cuestiones que agobian a
los seres humanos de la actualidad".
Siguió la jornada la disertación del Dr. José Luis Sánchez, Vicerrector de Extensión Cultural y Universitaria de la UCV y Director del curso de Pensamiento Cristiano.
DR. JOSÉ LUIS SÁNCHEZ: "PARA
MARÍAS LO MÁS PERJUDICIAL QUE LE HA SUCEDIDO AL HOMBRE DESDE EL SIGLO XX ES NO
DIFERENCIAR PERSONA DE COSA "
A
continuación de la conferencia de Monseñor Sánchez Sorondo, el Dr. José Luis
Sánchez, Vicerrector de Extensión Cultural y Universitaria de la UCV y Director
del curso de Pensamiento Cristiano, ha reflexionado en torno a las teorías
desarrolladas por Marías en la famosa obra Antropología Metafísica.
El Dr. Sánchez ha recordado que lo más perjudicial que le ha sucedido al ser
humano desde el siglo XX para Marías es "no diferenciar persona y
cosa".
El
Dr. Sánchez ha recordado que para Marías "la persona como tal se deriva de
la nada, de toda otra realidad, ya que a ninguna de ellas puede
reducirse". Si no la vemos como creada nos resulta "literalmente
inexplicable o bien parece violentamente reducida a lo que no puede ser: una
cosa".
"Respecto
a este tema, Marías afirma que no podemos demostrar que Dios crea a cada
persona, porque no disponemos de Él. Lo evidente es, en cambio, que cada
persona significa una radical novedad. Así para poder hablar de un creador, antes
hay que poder mostrar una creación ex novo (nueva) y ex nihilo (de la nada); si
la materia (protón más electrón) no tiene razón ni libertad, no puede crearla,
ni el hombre ni en un mundo inteligente. Solo puede crear un ser inteligente,
libre, para poder fortalecer el libre albedrío", ha expuesto.
El
Director del Curso ha apuntado, además, que Marías hablaba del niño como
alguien "que se deriva del padre y de la madre, de los antepasados y del
cosmos físico; pero, quién es, se trata de una cosa distinta. Cuando el niño
nace es un tercero absolutamente distinto, irreductible a todo lo demás".
"En
su opinión, al reducir las personas a cosas se ha llegado a lo más grave que le
ha ocurrido al ser humano, la legalización del aborto. Igual que hoy nos
escandalizamos de que el hombre haya sometido ?y, en algunos lugares aún
someta? a sus semejantes a esclavitud en un futuro sucederá lo mismo con el
aborto", ha aseverado el Dr Sánchez.
El
Vicerrector de la UCV ha relatado que Marías mostró a la persona como "una
innovación radical de la realidad" porque pudo no ser y, sin embargo, es:
"Si las categorías humanas fueran las de la materia estaríamos siendo
deterministas, cosa que es falsa cuando nos referimos al hombre. La persona no
se puede reducir a realidades dadas porque, además de su genética y del medio
ambiente en que se desarrolla, la persona es una novedad permanente que se va
haciendo".
El
Dr. Sánchez ha subrayado que Marías, a partir del concepto de la circunstancia
de Ortega ?"yo soy yo y mis circunstancias"? elabora, la
"estructura empírica de la vida humana". El intelectual español
"objetivizó al hombre para así tener conocimiento empírico de lo que es la
vida humana, que sería su estructura empírica".
A
través de esta teoría, el Director del Curso de Pensamiento Cristiano ha
referido que "Marías constituye unas verdaderas categorías antropológicas,
a partir de las que nos hace descubrir que el ser humano -que es sexuado antes
que sexual, hombre y mujer- es vectorial.
El
Dr. Sánchez ha manifestado que Marías entendía al hombre como ser
"trascendente", capax dei, (capaz de Dios, del latín),
porque es un ser "nuevo" y sus características no se pueden reducir
"a la genética y al medioambiente".
"A
partir de esta teoría empírica Marías no solo encuentra la posibilidad de Dios
desde la circunstancia de la persona sino también su necesidad vital de
trascendencia. Una de las categorías filosóficas de las circunstancias de
Marías es, precisamente, que el amor no se entiende sin la eternidad. Si una
persona ama no entiende que no haya una eternidad porque lo vive como a alguien
que amó desde siempre y para la eternidad", ha incidido.
Según
las ideas del discípulo de Ortega, la persona de la que alguien se enamora
"se convierte en un proyecto, siendo así que el amor es hacer del otro el
proyecto de la propia vida"; si no es de este modo, "no existe
amor". Por eso Marías hizo hincapié en que el amor "no se puede
reducir al sentimiento".
Al día siguiente empezó su intervención el Dr. Ildefonso Rodríguez, secretario del Curso de Verano y autor de la tesis doctoral que seguidamente se muestra en imágenes :
El Dr. Ildefonso Rodríguez, profesor de la Universidad Católica de Valencia "San Vicente Mártir" (UCV) y experto en la faceta de analista cinematográfico de Julián Marías, ha reflexionado en torno a la relación de este con el séptimo arte en el Curso de Verano de Pensamiento Cristiano de la UCV, centrado en el prestigioso filósofo español. En su intervención, el Dr. Rodríguez ha señalado que Marías "atribuía al cine la capacidad de hacernos comprender mejor al ser humano".
"Según
el pensamiento de Marías, el cine muestra cómo es el ser humano; descubre
diferentes perspectivas de la realidad y permite que veamos un problema desde
diferentes ópticas, lo que nos ayuda a entenderlas, a ser más abiertos.
Contemplamos en la pantalla distintos comportamientos humanos que nos van dando
una idea de lo que es el hombre", ha aseverado.
Sin
embargo, para el intelectual vallisoletano el hombre "no se agota en una
sola película", pues este no es de una determinada manera u otra sino que
se trata de "un ser complejo que nunca está dado". Por esa razón, ha
explicado el Dr. Rodríguez, Marías huía de aquellas películas que mostraban un
ser humano "monocolor" o que trataban de reducir al hombre "a
alguna de sus dimensiones o a uno solo de sus comportamientos".
En
ese sentido, Marías afirmaba que "el visionado de una serie de películas
adecuadas constituía todo un curso de antropología". De hecho, ha relatado
el profesor de la UCV, una de las intenciones de aquel durante su vida fue
precisamente la de escribir una "antropología cinematográfica". La
importancia del cine para el reconocido filósofo español fue tal que llegó a
explicar que sin la ayuda del cine "probablemente nunca hubiera llegado a
escribir su obra principal, Antropología
Metafísica".
El
cine constituía para Marías, sobretodo, "un instrumento de primer orden
para educar los sentimientos del ser humano. Resulta muy complicado describir e
incluso definirlos, explicar a alguien lo que es el amor, o el miedo, o la
soberbia, o la traición. En cambio, ha aducido el Dr. Rodríguez, en el cine
"podemos ver esos sentimientos, están ante los ojos del espectador"
"En
una película vemos vivir, vemos a personas que lidian con el quehacer
cotidiano, con las dificultades que la propia vida pone en su camino y por ello
el espectador puede aprender también a afrontar las suyas. Todos hemos salido
alguna vez del cine queriendo ser generosos o valientes, aún a sabiendas de la
dificultad de la tarea; pero hemos visto a alguien hacerlo en la pantalla y eso
nos sirve como inspiración", ha manifestado.
El
Dr. Rodríguez ha recordado que, para Marías, todos los personajes que el
espectador descubre en las películas le dan una idea "de la gran riqueza
que posee el ser humano y que éste nunca está cerrado sino que ha de ir
haciéndose y educándose para alcanzar su realización".
Por
otra parte, el profesor de la UCV ha indicado que, aunque Marías escribió más
de 1.500 artículos sobre cine, "nunca se consideró un crítico de cine sino
como un aficionado, enamorado del séptimo arte". Marías acudía al cine
"siempre acompañado" y lo hacía "con ilusión", otra palabra
clave en el pensamiento de este autor.
"Para
Marías escribir su artículo semanal sobre cine fue un hobby. Decía que nunca le
hubiera gustado ser crítico profesional porque entonces debía ver todas las
películas y como muchas eran malas pensaba que eso hubiera acabado con su
ilusión por ir al cine. Él iba a ver sólo aquellas que a priori podía
considerar que tuvieran algún interés. También afirmaba que no debía nada a
nadie en el mundo del cine y por ello podía escribir sobre lo que quisiera en
sus artículos, en los que no había un patrón definido. Veía una película y
luego escribía cualquier cosa que le hubiera sugerido su visionado", ha
expuesto.
Respecto
al estilo literario de los escritos sobre cine de Marías, el Dr. Rodríguez ha
manifestado que este era "un gran intelectual con una vasta formación
cultural y sus artículos cinematográficos le servían para ponerlo todo en
conexión".
"Hoy
en día la crítica está muy especializada y es complicado que se mezclen
saberes. Los críticos de cine escriben sobre cine y ya está, es extraño que
también sepan mucho de historia por ejemplo que les sirva para analizar
históricamente una película o que se atrevan a afirmar que «esta película le
hubiera encantado a don Miguel de Unamuno» como hacía Marías. Las críticas de
cine de Marías son un torrente de saber", ha afirmado.
Finalmente,
el profesor de la UCV ha matizado que Marías "nunca habló mal sobre
ninguna película por pésima que fuera; siempre encontraba algo positivo".
Por supuesto, señalaba sus "fallos y debilidades", ha especificado,
pero "se podía aprender algo de todas las películas".
Concluyó la jornada el autor de esta bitácora, con el resumen correspondiente:
FRANCISCO JAVIER SALGADO: "HEMOS
DE SERVIRNOS DE LA ERA DE LA ELECTRÓNICA PARA EXTENDER LA VERDAD Y EL
CONOCIMIENTO DE MARÍAS"
La
segunda conferencia de la jornada ha corrido a cargo de Francisco Javier
Salgado, discípulo de Julián Marías y creador del blog La realidad en su conexión,
en la que ha analizado la importancia de la recopilación de documentos sobre
Julián Marías en internet "para que su legado filosófico esté al alcance
de todo el mundo". Salgado ha asegurado que, dado que el prestigioso
intelectual español "le han enseñado a vivir su vida de una manera comprometida,
en busca de la verdad y, por tanto, feliz", va dedicar el resto de ella
"a compartir la sabiduría de Marías con los demás".
"La
era de la electrónica está creando una nueva cultura de la que tenemos que
servirnos para extender la verdad y el conocimiento en todo su esplendor. Quién
mejor que Marías para representar la proa de la nueva época que se
avecina", ha asegurado.
Salgado
ha lamentado que hoy se asista "al fenómeno -señalado por Marías- de la
destrucción consentida de la filosofía", una situación "enormemente
amenazadora" que puede dar lugar a "un periodo de decadencia
humana".
En
ese sentido, el discípulo de Marías ha recordado que "la raíz de los
principios de Occidente es su filosofía"; de modo que "no debe
olvidarse" que la ciencia occidental ha nacido de esta.
"Además, y esto es lo grave, ha habido una suplantación de la filosofía
por otras cosas que no lo son. Cuando Marías daba clases en Estados Unidos muy
pronto tuvo el temor de que cuando ese gran país tuviera necesidad de la
filosofía, se encontraría con una suplantación de ella. Esto está ocurriendo ya
en un alta medida", ha añadido.
Salgado
ha señalado que Marías comenzó a avistar la llegada de esta situación en una
conferencia realizada en Valladolid en 1966, titulada Las tendencias actuales del saber
y el horizonte de la filosofía, más tarde en el libro Nuevos ensayos de Filosofía,
y volvió a repetirlo en la obra Innovación
y arcaísmo: "Marías veía que, con el abandono progresivo de la
filosofía esas tendencias estaban cada vez más presentes y se hacía difícil
encontrar personas que pensaran a la altura del tiempo".
Por
ello, el discípulo de Marías ha hecho hincapié en que la obra del intelectual
vallisoletano puede encaminar al lector "a llevar una vida auténtica que
sin la filosofía no es posible". En opinión de Salgado, el hombre vive
"sobre un sistema de creencias vitales", pero se llega aciertas
situaciones "en que las creencias son insuficientes por razones como un
conflicto de creencias o nuevas realidades", tras lo que el ser humano
"recurre a la razón; ahí resulta imprescindible la filosofía, la búsqueda
de la evidencia en la realidad".
"Para
proyectar mi vida, he de hacerlo desde hoy, desde el nivel alcanzado, si
proyecto desde un ayer, por muy valioso que sea, pierdo el presente y el futuro
queda obturado. Es necesario recuperar la realidad porque, en caso de volver la
espalda a la filosofía, se produce una falsificación de la misma y la pérdida
del proyecto histórico, que es lo que está ocurriendo en Occidente", ha
aducido.
Salgado
ha apuntado que esta cadena de acontecimientos se ha producido "en la
mayor parte del mundo" a lo largo de la historia. "Frente a las
culturas del planeta en las que apenas se ha evolucionado, Occidente ha ido
cambiando a través de los siglos precisamente por tener filosofía. Si la
dejamos ahora de lado, Occidente no creerá, no innovará y no cambiará. Sin la
filosofía aparece el fracaso de la vida", ha finalizado.
El día 7 de agosto comenzó con la intervención del nieto de Julián Marías, Alejandro Marías
El
músico Alejandro Marías, nieto de Julián Marías, ha participado en el Curso de
Verano de Pensamiento Cristiano que la Universidad Católica de Valencia
"San Vicente Mártir" (UCV) celebra en Santander con una ponencia
sobre la experiencia de haber crecido junto al renombrado filósofo vallisoletano.
"El respeto a la vocación es, sin duda, lo que tenemos en común sus
descendientes", ha subrayado.
"Siempre
nos animó a hacer aquello que nos gustaba y a hacerlo lo mejor que pudiéramos.
Ser músico no es el medio de vida más seguro al que uno pueda optar, pero ser
filósofo en un país cuyo dictador te prohíbe escribir y dar conferencias, desde
luego, tampoco", ha relatado.
Así,
Marías ha señalado que "la influencia de su abuelo en su manera de hacer
música es la misma que a nivel personal: tratar de ser fiel a la propia manera
de pensar y de sentirla". Para el intérprete perteneciente al conjunto de
música clásicaLa Spagna, "veracidad, fidelidad y
moderación" son tres palabras que describen "muy bien" a su
abuelo.
Marías
ha manifestado que trata de parecerse al autor de Antropología Metafísica en dichos
aspectos y en tener la "valentía" de hacer siempre lo que cree que
debe hacer. "Para ello, además de una cierta dosis de terquedad, es
necesario ser muy honesto, pues cuántas veces lo mejor no es lo que más nos
conviene", ha añadido.
"Desde
muy pequeño fui consciente de que ser nieto de Julián Marías era un privilegio
insólito que no tenía por qué durar mucho. Intento blindar en mi memoria y
revivir con frecuencia todo cuanto aprendí de él, sus opiniones siempre
argumentadas y, sobre todo, la manera en la que incitaba a razonar", ha
indicado.
El
músico de La Spagna ha recordado que Marías no era un abuelo "al
uso", aunque a veces "lo habría deseado", pero ha considerado
"una suerte" poder seguir contando con él a través de sus libros, que
siempre escucha "con su voz". En ese sentido, ha especificado que su
abuelo "tampoco solía dar consejos si no se le pedían, pero era conciso y
certero en ello"; de modo que, a menudo, cuando debe tomar una decisión
intenta imaginar "lo que él habría aconsejado".
"Tener
por abuelo -y vecino- a Julián Marías es algo que, sin duda, marca de por vida.
Una vez me dijeron que los Marías estábamos condenados al síndrome de Carl
Philip, en alusión al genial compositor C.P.E. Bach, hijo del aún más genial
Johann Sebastian. En efecto, todos hemos crecido a la sombra de un gigante
pero, por se trataba de una sombra sutil, que tamizaba la luz sin privarnos de
verla ni, acaso, de brillar por nosotros mismos", ha remarcado.
Al
hilo del compositor alemán, Marías ha aseverado que su abuelo "no tenía
buen oído para la música", pero piensa que le habría entusiasmado Bach
"de haber conocido su obra con mayor profundidad". Marías ha matizado
que el ilustre intelectual vallisoletano sí tenía, en cambio, un "estupendo
oído" para los idiomas, "otro de sus talentos".
"De
cualquier manera, mi abuelo no solía hablar de lo que no dominaba y, aunque
tenía una cultura increíblemente amplia que no excluía la música, rara vez se
pronunciaba al respecto. Sin embargo, en sus últimos años, cuando ya casi no
veía, sí se hizo algo más melómano; sentía predilección por Mozart. Le
regalamos un pequeño equipo de música y, a veces, mi hermana o yo pasábamos a
estudiar violín o cello, respectivamente, a su salón", ha
apostillado.
La última disertación corrió a cargo de Alejandro Abad
ALEJANDRO ABAD: "PARA MARÍAS EL
EJERCICIO DEL DERECHO NO DEBÍA ABSTRAERSE DEL PRINCIPIO MORAL DE INTENTAR HACER
LO MEJOR"
El
abogado Alejandro Abad, Presidente de la Asociación de Amigos de Julián Marías
(AAJM), ha participado también en el Curso de Verano de Pensamiento Cristiano de
la UCV, centrado en la figura del ilustre filósofo español. En su ponencia,
Abad ha aseverado que, según la visión de Julián Marías, el ejercicio del
Derecho "no debía abstraerse del principio moral de intentar hacer «lo
mejor»: partir de la promulgación de las mejores leyes posibles para acabar en
la mejor aplicación de las mismas a cada caso concreto".
"Como
abogado, Marías me enseñó el respeto a la realidad personal y social. Una
realidad puede verse desde distintas perspectivas como la personal o la social,
pero no debemos renunciar a defender con valor y firmeza la verdad, arrostrando
los riesgos inherentes a su defensa. Nunca se cansó de insistir en el valor de
la verdad", ha expuesto.
El
Presidente de AAJM, que ha reflexionado sobre la relación entre Derecho, moral
y sociedad en el pensamiento de Marías, ha relatado que de él aprendió "a
valorar la concordia", pues aunque uno no esté de acuerdo en un
determinado asunto con el contrario, "debe intentar resolverse el
conflicto respetando la parte de verdad que puede caber en su
posición".
Otra
de las ideas del intelectual vallisoletano que ha quedado grabada en la mente
de Abad es "la necesidad de pensar". Para Marías "cada cuestión
precisa de un tratamiento desde la reflexión, por lo que no es bueno aceptar
por principio las respuestas que son generalmente asumidas. Hay que dar cuenta
y razón de cada actuación, proposición y pretensión que tengamos".
Abad
ha considerado, asimismo, que el pensamiento del filósofo español tiene
"mucha vigencia". Este ha proporcionado el método de la estructura
empírica de la vida humana, "que supera al que recibió de Ortega y supone
una admirable herramienta para proyectar sobre la realidad personal o social de
cada momento".
"Si
el método de Marías fuera más conocido y utilizado por los intelectuales y las
personas con responsabilidades en la sociedad actual, indudablemente
contribuiría a hacer una sociedad más justa y responsable", ha
subrayado.
En
ese sentido, Abad ha hecho hincapié en que debe partirse "del conocimiento
de la persona, del descubrimiento tanto de su consistencia como de la que
también posee la sociedad. Si esta no se falsifica puede aplicarse el principio
clásico de dar a cada uno lo que le corresponde, de hacer justicia y también de
hacer política".
"Marías
aspiraba a una sociedad que, desde el respeto y conocimiento a su historia,
pudiera dar razón de su consistencia y funcionase de acuerdo con el principio
moral de intentar hacer lo mejor, dentro de sus posibilidades y
circunstancias", ha finalizado.
El último día, 8 de agosto comenzó su intervención el Dr. Enrique San Miguel,
Catedrático de Historia del Derecho de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid
(URJC),
DR. ENRIQUE SAN MIGUEL: "JULIÁN
MARÍAS SEGUIRÍA SIENDO FIEL A LA ESPAÑA CONSTITUCIONAL DE 1978"
El
Dr. Enrique San Miguel, Catedrático de Historia del Derecho de la Universidad
Rey Juan Carlos de Madrid (URJC), ha pronunciado la conferencia La España que entendía
Julián Marías. En su intervención, el Dr. San Miguel ha
expuesto que Marías "seguiría siendo leal a la España constitucional de
1978".
"Marías
era liberal, demócrata y español. Para él nuestro país era una nación con
argumento, un discurso con sentido. Consideraba España como una identidad y una
presencia en una historia universal de la que es motor y agente de
cambio", ha aseverado.
El
Catedrático de Historia del Derecho de la URJC ha recordado que "todas las
grandes generaciones de la cultura española, desde el Renacimiento a los poetas
del 50, pasando por el Siglo de Oro, la Ilustración, la novela realista, o las
generaciones del 98 y del 27, han puesto su mirada sobre España".
Dicha
mirada, según ha indicado el Dr. San Miguel, posee una perspectiva
"crítica" pero, a su vez, es una mirada "llena de amor y
de ilusión". Para el experto de la URJC, Marías era parte de esa visión,
"en la que siempre prevalece la esperanza".
Frente
a la situación política y social del presente en España, el Catedrático de
Historia del Derecho ha relatado con claridad el pensamiento del intelectual
vallisoletano: "Marías no tenía recetas. Su apuesta era siempre el
trabajo, el esfuerzo, la exigencia y la excelencia. Subrayaba especialmente la
necesidad de pensar, y de hacerlo con grandeza y generosidad".
Marías
falleció en el año 2005, poco antes del estallido de la crisis económica
mundial, que ha afectado especialmente a España, en la que se han sucedido los
casos de corrupción y el consiguiente aumento de la desconfianza hacia la clase
política. Frente a esta situación, el Dr. San Miguel ha aducido que Marías
"abogaría por restablecer la plenitud de la experiencia humana, es decir,
la vocación por la verdad".
Así,
este experto ha remarcado que Marías se propuso no mentir "ya desde su
primera infancia". Para el filósofo español, un hombre "íntegro y
honesto", la falsedad, bajo cualquiera de sus formas, era "la más
funesta de las conductas humanas".
Finalmente cerró el curso la conferencia de Leticia Escardó
LETICIA ESCARDÓ: "MARÍAS CREÍA QUE
A ESPAÑA LE FALTABA PENSAMIENTO"
La
periodista Leticia Escardó, directora durante trece años de la revista fundada
por Julián Marías, Cuenta y Razón, ha
participado también en el Curso de Verano de Pensamiento Cristiano de la UCV,
centrado en la figura del reconocido filósofo español. Al recordar la última
entrevista que realizó a su "jefe y amigo de verdad" poco antes de
fallecer en 2005, Escardó ha hecho hincapié en la escueta respuesta que Marías
le dio a la pregunta de qué creía que le faltaba a España:
"Pensamiento".
"Cuando
hice esa entrevista sabía que prácticamente sería la última que le hiciese
porque ya estaba gravemente enfermo y estuvimos hablando a fondo de muchas
cosas. Creo que, como me dijo él, quizás, lo que le falta a nuestro país en
este momento es precisamente pensamiento; en la prensa, en los políticos y en
nuestro hacer general", ha apuntado.
Escardó
ha recordado que diez años antes de que muriese el dictador Francisco Franco,
Marías opinaba en un artículo: «Todo el mundo se pregunta qué va a pasar cuando
muera Franco y yo me pregunto ¿por qué no decimos qué voy a hacer yo, desde un
punto de vista ético?». Para esta periodista si esa pregunta se la planteasen
"de verdad" los españoles la situación de España sería
"distinta" hoy. "Nos falta pensamiento, y después, acción",
ha puntualizado.
A
causa de esa carencia, según ha afirmado Escardó, el filósofo vallisoletano
pensó, en crear una revista española de pensamiento dentro de la Fundación de
Estudios Sociológicos en el año 1980: "Marías creía que la estructura
espiritual de España, que consideraba curiosísima, se fundamentaba en las
columnas de papel. Era heredero de Ortega y Unamuno, sus maestros, y escribía
en papel; todos sus escritos están recogidos en libros, hasta La fuerza de la razón, uno de sus
últimos escritos periodísticos".
La
ex directora de la mencionada revista ha relatado que el primer número de Cuenta y Razón, de 150
páginas, se publicó en el invierno de 1981, "en un momento tremendo
situado entre la dimisión de Adolfo Suárez como presidente del Gobierno y el
golpe de Estado de Tejero".
"En
realidad, la revista se había escrito dos meses antes de su publicación y
resulta de gran importancia por lo que dice Julián Marías en el larguísimo
primer artículo, larguísimo, que supone una recapitulación de los cinco años
anteriores, de cómo España había sido recuperada por los españoles y de lo que
se había conseguido. Ese texto es casi un factor programático para los años
siguientes, ya en democracia", ha subrayado.
Escardó
ha insistido en que ha sido "maravilloso" trabajar "tantos
años" en Cuenta y Razón, una revista
basada en la idea de la necesidad del pensamiento, pues para Marías "la
educación era la base para que España fuese un país rico en proyectos y
perspectivas, y a largo plazo".
Finalmente fue clausurado el curso de verano con las palabras de Monseñor Osoro, que quedan resumidas seguidamente:
NOTA DE PRENSA | UCV
Mons. Carlos Osoro reivindica “la actualidad del pensamiento de Julián Marías” en la clausura del curso de verano de Santander de la Universidad Católica de Valencia
Han pronunciado las dos últimas conferencias el Dr. Enrique San Miguel, Catedrático de Historia del Derecho de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid (URJC), y de Leticia Escardó, directora durante trece años de ‘Cuenta y Razón’ la revista fundada por el filósofo español
Monseñor Carlos Osoro, Arzobispo de Valencia y Gran Canciller de la Universidad Católica de Valencia “San Vicente Mártir” ha clausurado el curso de verano de Santander sobre Julián Marías. Mons. Osoro ha apuntado que estas jornadas han ayudado a los participantes “a descubrir la gran actualidad del pensamiento de Marías, que ayuda a todos a proseguir pensando en las cuestiones que afectan al ser humano y a la vida de España”.
“Han sido unos días extraordinarios de creatividad, profundización y escucha, en los que han surgido proyectos importantes para las necesidades de este mundo; en concreto en España. Entre ponentes y estudiantes hemos pensado durante una semana en la realidad y el futuro del hombre y de nuestro país”, ha afirmado.
El Gran Canciller ha agradecido la labor realizada, por otro lado, a los organizadores del curso, a la Fundación Universitaria, “que ha colaborado especialmente”, y a la UCV, que creado el “marco” para la realización del curso”, que han permitido “trabajar sobre las ideas de un pensador cristiano de la talla de Marías”.
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